París es una de esas ciudades que además de ofrecerte como turista un montón de monumentos, iglesias y espacios de ocio, te ofrece también una completa gastronomía nacional con la que conquistarte por el paladar. Y en ella destacan sus vinos, tanto por su alta calidad como por estar entre los más vendidos del mundo. En este caso queremos hacerte descubrir la capital francesa a través de sus caldos, porque hay rutas e itinerarios para los amantes del buen vino.
Los mejores lugares para disfrutar del vino en París
Si quieres conocer el país de los vinos, la mejor de las opciones es que te sitúes en el margen izquierdo del río Sena. Justo allí te encuentras los distritos 5 y 6 de la capital. Si partes del museo del Louvre y te diriges a la calle Mouffetard, es muy probable que el escenario ya te delate lo que vas a degustar a continuación. La que fue la casa de Hemingway esconde unos cuantos locales cuya especialidad es el vino francés y estos exigen tu primera parada.
Para seguir la ruta por el margen izquierdo del río, hay que poner rumbo al Panteón. Justo enfrente hay un local con baldosas blancas en el que repetirás parada para quedarte con otro de los exquisitos vinos que se sirven en París. Si dejas que el camarero te haga una recomendación, es probable que la ciudad te deje aún mejor sabor de boca. Si no, puedes probar a pedir directamente un grand cru, que viene siendo la denominación más alta de calidad en los vinos franceses.
Puedes seguir andando dejándote sorprender por algunos de los bistrós que hay en la ruta que te llevará hasta Notre Dame. Incluso es recomendable que hagas una parada para comer en alguno de ellos. Y por supuesto, que acompañes tus platos de un buen vino francés. Justamente en la catedral es donde vas a poner fin a tu ruta vinícola. En el lateral de esta, justo en la acera de enfrente, hay un local muy auténtico que hará que los vinos de la región de Burdeos te conquisten. Si nunca los has probado, prepárate para sus sabores afrutados que gustan a todo el mundo.
Oferta turística de catas de vino
Son muchas las opciones que tienes para hacer una buena ruta del vino en la capital francesa. De hecho, con un simple paseo por los lugares que te hemos mencionado anteriormente vas a poder darte cuenta de cuántos locales te ofrecen la posibilidad de conocer a fondo los caldos más típicos del país. Pero si quieres algo más exclusivo, un plan en el que el vino tome un papel protagonista con un entorno mágico, puedes degustarlo acompañado de platos franceses en un escenario sin igual: en un crucero por el Sena. Los camareros te indicarán cuál puede ser el vino que mejor encaje en tus expectativas y seguramente acierten de pleno dejándote sorprendido por la alta calidad de la recomendación. Esta es sin duda una de las formas más turísticas de disfrutar de las tres cosas que más llaman la atención de París: sus monumentos, su paisaje y su gastronomía.
Disfrutando el vino en la cocina
Pero si los vinos franceses son una de las mejores opciones para acompañar un buen plato, no son la única manera de saborearlos. De hecho, en los mejores restaurantes de la Ciudad de la Luz, el buen vino se utiliza para preparar los platos que luego nos llevamos a la boca. Aunque para muchos es un verdadero desperdicio cocinar con caldos tan buenos, los chefs defienden que les dan un toque especial, imposible de conseguir con otro tipo de bebida.
Si eres de los turistas que quiere conocer esta parte tan especial y esencial de la gastronomía francesa, y sobre todo aprender algunas de las técnicas más interesantes para combinar el vino con los diferentes platos franceses, entonces deberías pensar en la posibilidad de reservar algunos de los cursos de cocina que se imparten a turistas y en los que se te desvelarán este tipo de secretos.
Está claro que París te ofrece grandes opciones en cuanto a gastronomía, y sería una pena no aprovecharlas en tu viaje a la ciudad del Sena. De hecho, la ruta que te hemos propuesto puede hacerse en un día completo y aprovechar a la vez para visitar los monumentos que la jalonan, que son además de los más importantes.
Si tienes más tiempo, otra posibilidad para disfrutar de los vinos franceses es contratar alguno de los tours que te llevan a conocer las regiones de Francia en las que se producen los mejores caldos. Hay tours de tres días en los que se recorren varias localidades y te ofrecen visitas guiadas a bodegas, e incluso catas con expertos que te explicarán el secreto de producir tan buenos vinos. ¿Quieres retar a tu paladar con estos exquisitos caldos franceses?